Ferrocarril del puerto de Chancay: nueva ruta minera del Pacífico
El megaproyecto del ferrocarril del puerto de Chancay marca un nuevo hito en la integración económica de Sudamérica. La compañía China Power Construction Corporation (PowerChina) ganó la licitación del contrato EPC, valorado en 420 millones de dólares, para construir la línea ferroviaria que unirá las zonas mineras del centro del Perú con el puerto de aguas profundas de Chancay.
Un corredor estratégico para la minería y el comercio exterior
El ferrocarril tendrá una extensión de 120 kilómetros y será clave para el transporte de cobre, litio y otros minerales hacia el Pacífico. Su construcción, que durará 36 meses, reducirá el tiempo de traslado de mineral de hasta 18 horas a solo 5, disminuyendo los costos logísticos en hasta 40 dólares por tonelada.
Según estimaciones oficiales, las empresas mineras peruanas podrían ahorrar más de 1.500 millones de dólares anuales una vez entre en operación en 2028.
El puerto de Chancay, desarrollado por COSCO Shipping y socios peruanos con una inversión de más de 3.000 millones de dólares, está diseñado para recibir buques de hasta 18.000 TEU. La conexión directa con el ferrocarril permitirá crear un corredor integrado de “puerto + ferrocarril + minería”, mejorando la competitividad exportadora del Perú.
“Ruta de la Seda de los Recursos”: un nuevo mapa logístico
El ferrocarril del puerto de Chancay será un eje clave de la llamada Ruta de la Seda de los Recursos Latinoamericanos. Permitirá unir las minas de cobre y litio del centro peruano con los proyectos de litio en Chile y los puertos del Ecuador, generando un corredor regional de transporte para el comercio de nuevas energías.
Para China, el mayor importador de cobre del mundo, este proyecto representa un paso estratégico. Permitirá a empresas como Chinalco y China Minmetals asegurar el control logístico y reducir riesgos asociados a precios internacionales y fluctuaciones del petróleo.
Impacto económico y social en Perú
A nivel local, el proyecto generará 8.000 empleos directos y 30.000 indirectos, beneficiando a ciudades como Huacho y Barranca, que se convertirán en nuevos polos industriales. Además, PowerChina implementó acuerdos de compensación social y estrategias ambientales coordinadas con las comunidades locales, cumpliendo los estándares de sostenibilidad exigidos por el Estado peruano.
El modelo de “construcción segmentada y entrega escalonada” permitió superar los desafíos de adquisición de tierras y estabilidad política. Se trata de un modelo replicable para futuros proyectos de infraestructura en la región andina.
Conectando Sudamérica al Pacífico
Con la puesta en marcha prevista para 2028, el ferrocarril del puerto de Chancay conectará las riquezas mineras del corazón andino con los mercados asiáticos. Es una obra que simboliza una nueva etapa de cooperación entre Perú y China, fortaleciendo la infraestructura logística de Sudamérica y consolidando su papel como eje comercial del Pacífico.
