¿Está el volcán más pequeño del mundo en Cusco? ¿Qué dice la ciencia al respecto?

El 7 de julio, en el distrito de San Pablo, provincia de Canchis, Cusco, apareció un fenómeno natural inusual: un pequeño volcán de apenas 60 cm de altura. Este “volcán” expulsaba continuamente lodo gris y sustancias similares a la arcilla, lo que despertó gran interés en redes sociales y atrajo a numerosos curiosos.
Arturo Mamani fue el primero en dar a conocer este fenómeno. Vestido con una capa tradicional, tomó fotos y videos que compartió en redes. En ellas, Mamani y su familia rendían homenaje a la Madre Tierra, ofreciendo hojas de coca en señal de respeto y gratitud. Su acto motivó a otros a acercarse y observar el “pequeño volcán” de cerca, ubicado a unos 200 metros de la carretera, cerca del puente Songonia, siguiendo la ruta desde la estación de autobuses de San Pablo.
El fenómeno generó también preocupación por actos de vandalismo, lo que llevó a la comunidad a exigir protección. En respuesta, el alcalde Marco Antonio Cacarita Eucla coordinó con autoridades locales, patrullas agrícolas y la Oficina de Gestión de Riesgos para implementar medidas de resguardo hasta definir un plan permanente.

El Instituto Geofísico del Perú (IGP) aclaró que este “volcán más pequeño del mundo” no es un volcán real, sino un cono de lodo y agua formado por gases como metano y dióxido de carbono que arrastran sedimentos arcillosos desde el subsuelo. Hernando Tavira, director del IGP, explicó que esta estructura natural se diferencia en origen y actividad de los volcanes activos del sur del país.
Aunque el fenómeno no representa un riesgo volcánico, Tavira advirtió que el lodo expulsado podría afectar fuentes de agua y cultivos cercanos. Por ello, el monitoreo científico continúa para proteger el medio ambiente y la comunidad. Así, este “pequeño volcán en Cusco” se mantiene bajo observación para garantizar la seguridad y preservar este singular fenómeno natural.