Producción y calidad de anchoveta en Perú afectan mercado global

La industria pesquera peruana enfrenta un reto urgente. La producción y calidad de anchoveta han disminuido notablemente. En la semana 22 de 2025, la producción cayó un 48 % respecto al mes anterior, alcanzando solo 184,313 toneladas. Esta caída se debe a condiciones climáticas adversas y políticas locales de veda. La frase clave objetivo producción y calidad de anchoveta en Perú es central para entender la situación actual.
Este descenso afecta no solo a la pesca local, sino también al mercado mundial de harina de pescado. James Frank, gerente general de MSICeres, destacó que la calidad de la anchoveta ha empeorado desde la semana pasada. En este contexto, el precio CFR China de la harina de pescado de primera calidad ronda los US$1,650 por tonelada si hay stock al contado, mientras que la harina de calidad estándar se cotiza en US$1,600 por tonelada. Los fabricantes peruanos actúan con cautela para equilibrar oferta, demanda y presión de precios.

Los datos de la Red de Información de la Industria de Alimentos Balanceados (PIB) indican que, al 2 de junio de 2025, el inventario portuario era de 300,300 toneladas, 2,900 menos que el mes anterior. Esta reducción constante, junto con la fluctuación en producción y calidad, genera preocupación sobre la estabilidad futura del suministro de harina de pescado.
Frank también señaló: «Nos sorprendió que no se reportara captura alguna en Paita/Chicama y Chimbote el 26 de mayo». Las estadísticas oficiales muestran que en la temporada A, la captura acumulada en las zonas centro y norte fue de 1.62 millones de toneladas, con un cumplimiento de cuota del 54 %. En el sur, la captura fue de 194,608 toneladas frente a una cuota de 251,000 toneladas, evidenciando una desaceleración significativa.
Se estima que el volumen de ventas de harina de pescado esta temporada será de aproximadamente 490,000 toneladas, el 68 % de la cuota total. Aunque el inventario en puertos chinos es alto, la demanda global sigue sólida. Además del mercado chino, países como Ecuador, Taiwán, Japón y Europa mantienen un consumo activo.

El futuro de la producción y calidad de anchoveta en Perú es incierto. La estabilidad del mercado y la evolución de precios dependerán de la capacidad del sector para afrontar estos desafíos y adaptarse a la dinámica global. La gestión sostenible y la vigilancia constante serán claves para mantener la posición de Perú en el mercado mundial de harina de pescado.