Los Ángeles se levantó en protestas contra las redadas de deportación

Los Ángeles se ha levantado en protestas masivas contra las redadas de deportación ordenadas por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). Desde el viernes 6 de junio de 2025, miles de personas han salido a las calles para manifestarse contra estas operaciones en barrios con mayoría latina.
Las redadas, parte de la ofensiva migratoria del presidente Donald Trump, han generado una respuesta contundente. Las autoridades federales han desplegado más de 4,000 efectivos, incluyendo tropas de la Guardia Nacional de California, en una acción sin precedentes que ha desatado enfrentamientos con manifestantes. En varios puntos del área metropolitana, como el Distrito de la Moda, tiendas de ropa y una sucursal de Home Depot, se realizaron detenciones masivas que superan las 100 personas.

Las protestas han sido reprimidas con gases lacrimógenos, balas de goma y granadas aturdidoras, lo que ha provocado decenas de arrestos y múltiples enfrentamientos con la policía. Hasta el domingo 8 de junio, se reportaron al menos 42 detenidos en Los Ángeles y más de 150 en San Francisco. La violencia escaló cuando manifestantes bloquearon autopistas y prendieron fuego a vehículos, mientras las fuerzas del orden respondían con munición no letal.
El gobernador de California, Gavin Newsom, ha expresado su rechazo a estas redadas y criticó el despliegue de la Guardia Nacional, ordenado por Trump sin el consentimiento estatal, lo que ha generado una crisis política y social en la región.

La comunidad latina y organizaciones defensoras de derechos humanos han denunciado abusos y han llamado a la solidaridad internacional. En barrios como Paramount, los residentes defienden que su trabajo y contribución a la ciudad no deben ser criminalizados.
En suma, esta acción por parte de la ciudadanía refleja la profunda tensión social que genera la política migratoria actual. Esta movilización pone en evidencia el choque entre las medidas federales y la resistencia de una ciudad santuario que busca proteger a sus inmigrantes.
La situación sigue en desarrollo, con un impacto directo en la vida de miles de familias y en el debate nacional sobre migración y derechos humanos en Estados Unidos.