Resumen del debate presidencial entre Harris y Trump
En el reciente debate presidencial, Kamala Harris se destacó al dominar la conversación y mantener a Donald Trump a la defensiva, evitando que el expresidente pudiera centrarse en sus propias vulnerabilidades.
Harris al mando y Trump en defensiva.
Kamala Harris mostró un control excepcional durante el debate de 90 minutos contra Donald Trump, utilizando su habilidad como fiscal para aprovechar cualquier oportunidad para poner al expresidente en una posición defensiva. Desde el principio, Harris logró dominar la conversación al enfocarse en las debilidades de Trump, obligándolo a defenderse en lugar de lanzar ataques. Este cambio en la dinámica contrastó con el debate de junio en el que los demócratas habían quedado desalentados y decidieron cambiar a su candidato.
Las trampas de Harris para Trump.
Harris, al iniciar el debate, se acercó a Trump para darle un apretón de manos, un gesto significativo dado que era el primer apretón de manos en un debate presidencial desde 2016. Esta interacción marcó el tono de la noche y mostró la intención de Harris de presentarse de manera firme. Ella comenzó a poner a Trump en una posición incómoda, mencionando que los seguidores de Trump se estaban yendo de sus mítines y criticando su herencia familiar. Trump, en lugar de abordar estas críticas, cayó en callejones sin salida retóricos, incluyendo la defensa de las afirmaciones desacreditadas de la derecha sobre inmigrantes.
Trump defiende su trayectoria.
A lo largo del debate, Trump se vio en la necesidad de defender su desempeño en lugar de presentar un plan claro para un segundo mandato. Pasó mucho tiempo justificando su manejo de la pandemia, su decisión de despedir a asesores clave y su respuesta a la manifestación de extrema derecha en Charlottesville. En lugar de atacar la gestión de Harris y Biden, Trump se vio forzado a defender su propia administración, incluyendo la controvertida decisión de invitar a los talibanes a Camp David en 2019.
Harris y el aborto, punto débil Trump.
El aborto se convirtió en un punto fuerte para Harris, especialmente dado que Trump es vulnerable en este tema debido a su papel en la designación de jueces que ayudaron a anular Roe contra Wade. A pesar de la vulnerabilidad de Trump en este tema, él evitó responder directamente a preguntas sobre una prohibición nacional de aborto. Harris aprovechó esto para calificar la postura de Trump como un “insulto a las mujeres” y destacó las historias de mujeres que enfrentaron amenazas a su salud debido a restricciones sobre el aborto. Este intercambio fue uno de los momentos más fuertes de la noche para Harris.
El lenguaje corporal y comentarios despectivos de Trump.
Durante el debate, Trump mostró su desdén hacia Harris a través de su lenguaje corporal, evitando mirarla y respondiendo a sus comentarios con gritos y acusaciones. Harris, por su parte, utilizó su lenguaje corporal de manera efectiva, mostrando perplejidad y desdén hacia las afirmaciones de Trump. Cuando Harris mencionó la derrota de Trump en 2020 y las condenas criminales que enfrenta, Trump respondió con acusaciones infundadas y titubeos. En un momento, Trump usó contra Harris una frase memorable que ella había dicho en un debate anterior, mostrando su frustración.
“Yo estoy hablando, si no te importa, por favor”, dijo Trump visiblemente enfadado. “¿Te suena familiar?”.
Trump no logró vincular efectivamente a Harris con Biden.
Trump intentó vincular a Harris con las políticas impopulares de Joe Biden, especialmente en temas como la economía y la inmigración, acusando al gobierno Biden-Harris de permitir el paso de “millones” de inmigrantes por la frontera suroeste. Sin embargo, no logró hacer esta conexión de manera efectiva durante la mayor parte del debate. En lugar de eso, se mostró frustrado por la ausencia de Biden y se burló de él; por lo que Harris aprovechó esta oportunidad para recordarle a Trump que no estaba postulándose contra Biden, sino contra ella. Trump, en sus intervenciones finales, intentó resaltar las promesas no cumplidas de Harris, pero sin mucho éxito.
Al final del debate, Trump se dirigió a la sala de prensa para repasar su actuación, afirmando que había sido el mejor debate de su vida, a pesar de las dificultades y desafíos enfrentados durante el intercambio.